La cuestión reside en cómo dominamos el miedo. Vivir con el miedo subconsciente de la impotencia es peor que vencerlo y eso sólo se puede hacer de forma consciente…
La clave para dominar el miedo está en trasladarse de una posición de dolor a una posición de poder, El Poder de Nuestro Interior, del poder sobre las percepciones del mundo, poder para crear alegrías y satisfacciones, para dominar las reacciones ante situaciones diversas.
Reflexión: efectuar ese cambio del dolor al Poder es mucho más fácil si adoptas un nuevo vocabulario: en vez de decir “no puedo”, vas a decir Lo Haré, en lugar de “debería” “Podré”; en lugar de “es un problema”, dirás “Es la Oportunidad”; en lugar de decir “la vida es una lucha” dirás “La Vida es una Aventura”.
BENDICIONES
EDWIN
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