No hay mal que por bien no venga; este refrán popular resume la clave para pasar los malos tragos de la mejor manera posible.
La pregunta que podemos formularnos ante recuerdos dolorosos recurrente es; ¿Qué puede haber de bueno en todo lo ocurrido?, y constituye una gran ayuda para ser más positivos en la vida.
De este modo lograremos eliminar la parte negativa del recuerdo en nuestra mente y podrá mostrarnos las oportunidades que de otra manera podrían pasar inadvertidas.
Reflexión; Si te formulas la pregunta anterior cuando te sientas molesto o demasiado preocupado por algo que ha ocurrido, en pocos instantes recuperarás una agradable sensación de Paz.
BENDICIONES
EDWIN
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