Para fomentar nuestra felicidad futura debemos aceptar los aspectos negativos de nuestras acciones pasadas. Si lo vivido nos causa tristeza, melancolía, odio o malestar, dejemos fluir nuestras emociones, démosle espacio para que se manifiesten y así poder continuar con nuestra vida.
Aprendamos de nuestros errores y cuando fracasamos, ganamos sabiduría. No alcanzar nuestras metas sólo demuestra que somos creativos, que nos arriesgamos y que estamos dispuestos a probar cosas nuevas.
Reflexión; todos cometemos errores, pero no hay que dramatizarlo, ocurre y basta; si no fuéramos imperfectos no tendríamos nada que aprender y tampoco progresaríamos.
De este modo construimos nuestra felicidad en el presente, sabremos positivamente que somos capaces de pasar página de una forma sana, y desaparecerá nuestro temor a no encontrar la felicidad.
BENDICIONES
EDWIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario