Cuando empieces a fijarte metas puede que quieras comenzar con algunas fáciles. Conseguirlas puede proporcionarte confianza y poner a punto tus capacidades. Aunque es bueno iniciar poniéndose metas relativamente sencillas, no es la manera de continuar.
Cada vez que elijas una nueva, deberá ser algo más ambiciosa que la anterior. También habrás de demostrarte algo más persistente y esforzado, y su consecución debería proporcionarte un premio más grande y mejor. Puedes elegir el premio que quieras. Puede tratarse de un objeto material, como ropa nueva o una casa que estrenarás, o de algo no material, como más tiempo para ti mismo. La única consideración es que alcanzar la meta deberá mejorarte la vida de alguna manera.
Descubrirás que afirmar y alcanzar metas también es un proceso de Crecimiento Personal, y según se crece, uno se torna capaz de alcanzar objetivos más grandes.
Miguél Ángel, el artista y escultor renacentista, nos advirtió diciendo:“El mayor peligro para la mayoría de nosotros no radica en que nuestra meta sea demasiado alta y no lleguemos, sino en que sea baja y la consigamos”.
Bendiciones
EDWIN
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