No des más importancia a las cosas que pasan que a tu propia actitud interior ante esas mismas cosas.
La Tormenta, el contratiempo o la dificultad pueden ser iguales para dos personas, pero una intentará tomar el timón, gobernar la nave de su vida en medio de la tempestad, y la otra se dejará llevar como un corcho flotando a la deriva.
Mi reflexión es que; en tu interior está la capacidad de hacerte timonel o náufrago. ¡Tú decides!
BENDICIONES
EDWIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario