Cuando oramos, deseamos, soñamos, esperamos, imaginamos y anhelamos tendemos a mirar hacia lo alto, como si enviáramos al cielo nuestros pensamientos. Cuando estamos tristes, abatidos, decaídos, descorazonados y deprimidos, miramos al suelo.
Si miras el mundo y ves caos y destrucción, es hora de que filtres lo que ves y lo que lees. Ser consciente del mundo que te rodea es una cosa, pero vivir inmerso en él es otra muy diferente.
Intenta encontrar el equilibrio en tu dieta de noticias, para garantizar que tu proceso positivo y creativo no se esté bloqueando subconscientemente.
Mi reflexión; hoy presta atención a dónde miras, tanto literal como figurativamente, y verás cómo logras cambiar muchas cosas negativas a positivas. Inténtalo y verás cómo cambia tu punto de vista.
BENDICIONES
EDWIN
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