Nos hemos perdido en el hacer, en el pensar, en el recordar, en el anticipar: estamos perdidos en un complejo laberinto, en un mundo de problemas que muchos no podemos controlar y termina perjudicando nuestra salud mental y emocional.
Para encontrar la calma y apagar el ruido de la vida moderna necesitamos construirnos nuestro propio santuario. Organiza tu espacio interior mediante prácticas de meditación y de relajación, será como un rincón para encontrarte.
Escápate un fin de semana a la montaña o a un lugar tranquilo. Desconecta de los problemas rutinarios y aparca las preocupaciones de tu día a día. Para disfrutar de una calma total apaga el teléfono móvil y no consultes tus e-mails. Avisa si quieres a tus seres queridos más cercanos para que no se preocupen. El lunes por la mañana te sentirás con plena energía para afrontar las obligaciones de la semana.
Mi Reflexión; Si quieres que reine la paz en el mundo debes tener paz en tu hogar; para que la paz reine en tu hogar, debes primero vivirla en tu corazón.
bendiciones
EDWIN
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