El amor es la arteria vital de la humanidad, es la única forma que tenemos los seres humanos para relacionarnos y poder convivir en esta sociedad tan maltratada por nosotros mismos. Hemos mutilado con nuestras acciones la espiritualidad en las almas de la generación que está emergiendo que hoy son nuestros: jóvenes y niños inculcándoles antivalores.
No puede existir felicidad alguna, si solo pensamos en nosotros mismos y olvidamos la felicidad de todo los que nos rodean. Se debe construir una humanidad nueva basada en el amor y el respeto que renazca como el “AVE FÉNIX” de la entrañas del alma, no olvidemos que somos seres espirituales y por ello nos diferenciamos de los demás seres vivos.
El amor es la única arma que debemos usar, de él se desprenden todo los demás valores de la humanidad, aprendamos a caminar por la senda de la estabilidad emocional, quien ama no es capaz de ofender ni violentar los derecho de los otros.
El amor te enseña que todo se puede, que cada vez que nos caemos nos podemos levantar y se contará con alguien que nos extenderá la mano en nuestros caminos de angustia y soledad, así como también cada uno de nosotros damos alegría y mejoramos la vida de otros.
Reflexión; abramos muestro corazón al amor verdadero, amemos todo lo que nos rodea, sembremos amor para cultivar la felicidad en muestra existencia por esta tierra de los vivos. Tú y yo podemos romper paradigmas, dar ese gran paso y mostrar a todas nuestras huellas.
BENDICIONES
EDWIN
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