Esta medalla invisible posee dos poderes sorprendente: atraer o repeler la riqueza, el éxito, la felicidad y la salud, privándote de todo aquello que hace de la vida la más grandiosa oportunidad para cada ser humano.
Muchos se dan por vencidos y experimentan los conflictos mentales de un infierno viviente. Otros aprenden a extraer y a utilizar el Poder del Subconsciente y logran liberarse de estas telarañas mentales. Y ese precisamente es el resultado de “Creer en Tu Poder Interior”.
Es posible que un insecto no pueda evitar quedarse atrapado en la telaraña, y una vez atrapado, no pueda escapar. Hay una cosa, sin embargo, sobre la que cada persona ejerce un absoluto control: su actitud mental. Tú puedes evitar las telarañas en cuanto empiecen a desarrollarse y quieran impedir tu libertad. ¿Sabes cuando aparecen generalmente estás telarañas mentales? Cuando enfrentamos algún problema o situación difícil. ¿Y cuál es la manera apropiada de actuar en tal situación?
Reflexión: yo Personalmente creo que lo primero es dirigir nuestros pensamientos en forma positiva y controlar nuestras emociones, al hacerlo estaremos regulando nuestra actitud.
Podemos elegir en tener una actitud positiva o una actitud negativa, tenemos el poder de adoptar la decisión de influir, utilizar, controlar o estar en armonía con los cambios que se produzcan en uno mismo y en nuestro ambiente. Y de está manera estaremos encauzando nuestro destino.
Todos tenemos problemas, unos son GRANDES otros son pequeños, pero ello se debe a que tú, junto con todo lo que existe en el UNIVERSO, se hallan en un constante proceso de cambio.
Esta es una Ley Natural ineludible. Lo importante para ti es que el éxito o el fracaso que puedan producirse al afrontar los desafíos del cambio, dependen de “tu actitud mental”.
Espero que al culminar de leer estas líneas te des cuenta que lo más importante en todo el planeta tierra ¡Eres Tú! Que Reconozcas tu verdadero potencial y descubras cómo desarrollarlo y utilizarlo, sólo así encontrarás el verdadero PODER QUE CAMBIARÁ TODA TU VIDA.
BENDICIONES
EDWIN
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